¿Cómo moverse en San Francisco? Transporte público y otras opciones

Andar es una de las opciones más cómodas para moverte en San Francisco.

Así, si estás pocos días en la ciudad y debes decidir en poco tiempo dónde vas, conviene tener esto en cuenta para ser más eficientes. Las distancias suelen ser grandes entre un punto y otro y quizá no te dé tiempo a verlo todo si vas andando.

Hay un par de tarjetas de transporte bastante útiles y sencillas de usar:

• Clipper Card: Te la puedes descargar en el wallet del móvil sin tener que comprarla físicamente, aunque también hay máquinas para adquirirla. Funciona como un monedero, con lo que recargas y te olvidas. Sin embargo, para algunos transportes que atraviesan el Golden Gate es necesario pasarla al entrar y al salir porque te cobran por las paradas. Vimos además gente que subía sin ticar.
• MuniMobile: Aunque ofrece viajes ilimitados por tan solo 5 dólares al día, únicamente cubre los autobuses de dentro del área metropolitana. Puedes también incluir el famoso cable car por 13 dólares al día.

Si vas a San Francisco, no puedes dejar escapar la ocasión de montarte en el tradicional tranvía que recorre sus calles: el cable car.

Con MuniMobile, como te hemos comentado, puedes tener viajes ilimitados de los buses metropolitanos y este otro transporte por un total de 13 dólares, mientras que el pase diario e individual para el cable car es de 8 dólares.

Es también importante señalar que Google Maps está actualizado en tiempo real con todos los transportes, por lo que es bastante fácil encontrar la mejor ruta en tiempo real para moverse por San Francisco.

A pesar de que nosotros no alquilamos en esta ocasión un coche, puesto que es fácil moverse en transporte público y solo íbamos a visitar la ciudad, sí que hemos conducido bastante por Estados Unidos cuando hicimos la Ruta 66.

Para ello, solemos alquilar con Discover Cars, una compañía que trabaja con empresas locales y ofrece buenos precios, con un gran rango de coches de distinta gama.

Los precios, eso sí, varían bastante: desde los 20 hasta los 75 dólares al día por un turismo pequeño hasta los 700 euros que nos costó un SUV cuando hicimos la Ruta 66 en dos semanas. Alquilar el coche en una ciudad y devolverlo en otra (Chicago-Los Ángeles) lo encarece.

También necesitarás tener un Permiso Internacional de Conducir para manejar un vehículo.

En San Francisco puedes encontrar aparcamiento gratuito durante un par de horas.

Tampoco te recomendamos contratar el fast track que te ofrecen al alquilar el coche porque puede que no te salga a cuenta, ya que solo hay dos peajes para entrar en la ciudad, uno que se paga en ventanilla y el del Golden Gate.

Para más información sobre cómo conducir en Estados Unidos, consulta nuestra guía de conducción para la Ruta 66, con recomendaciones y consejos que te valdrán para visitar el resto del país.

A veces es incluso más barato usar Uber, la compañía de transporte privado, para moverse por San Francisco. Es una buena opción también para trasladarte del aeropuerto hasta la ciudad, aunque ten en cuenta que te pueden cobrar unos 40 dólares.

El BART (por sus siglas en inglés, Bay Area Rapid Transit o Transporte Rápido del Área de la Bahía) un sistema de trenes que operan en la Bahía de San Francisco, y cuenta con una parada en el aeropuerto.

El horario es desde las cinco de la mañana hasta las doce de la noche los días laborables, mientras que los sábados abre a las seis y los domingos a las ocho de la mañana. Tienes los horarios en la web del BART, y un punto muy bueno es que puedes usar la tarjeta Clipper.