Dublín
Los acantilados de Moher
Galway
Kilkenny
Dónde dormir
Excursiones de un día desde Dublín

La cosmopolita y divertida Dublín es, sin duda, la primera parada en nuestro itinerario de una semana para visitar los sitios imprescindibles en la ruta.

La capital irlandesa es una ciudad en la que siempre encontrarás algo que hacer, con un sinfín de actividades culturales durante todo el año y, cómo no, lugar único para disfrutar de una buena pinta de Guinness en un pub con música en directo, uno de los principales atractivos.

Temple Bar es el barrio más famoso y turístico de Dublín, lleno de bares con música en directo (de todo tipo).

Pero además vas a encontrar galerías de arte, tiendas únicas y muchos restaurantes. Visita el pub que da nombre al barrio, el Temple Bar, y su bonita fachada cubierta de flores. Pero visita también la Old Storehouse, el Oliver’s St. John’s Gogarty o el The Quays Bar.

El barrio es, por tanto, uno de los más animados en la noche nocturna dublinesa, y por supuesto, uno de los lugares imprescindibles que ver en Irlanda en una semana.

Visita obligada para los amantes de la historia, el Museo Nacional de Arqueología es un viaje a través de la historia irlandesa y uno de los lugares imprescindibles en la lista de qué hacer en Irlanda.

El centro cultural alberga una extensa colección de piezas históricas desde el Neolítico, con objetos de la época vikinga e, incluso, una sala íntegramente dedicada a Egipto.

La entrada es gratuita y abre todos los días.

Si piensas que Central Park de Nueva York o el Jardín Inglés de Munich son grandes, deberías visitar el Phoenix Park de Dublín si estás un par de días en la ciudad.

Se trata de uno de los parques urbanos más grandes del continente, un pulmón verde en pleno Dublín, en el que puedes visitar el zoológico local o pasear por sus innumerables senderos y disfrutar de la naturaleza. Con algo de suerte, verás a los ciervos.

La entrada al Trinity College, la universidad más importante y antigua de Irlanda. (1592), es gratuita: Puedes pasearte por sus bonitos jardines y explanadas sin problema, y admirar sus hermosos edificios.

En su biblioteca, con una impresionante colección de libros y manuscritos históricos de todas las épocas, se encuentra también el Book de Kells, un manuscrito del año 800 realizado por monjes celtas y que contiene los cuatro Evangelios del Nuevo Testamento. La entrada cuesta 18,50 euros.

La biblioteca Chester Beatty de Dublín, cerca del castillo, alberga cientos de libros, papiros y objetos cristianos, musulmanes y orientales.

Es un centro cultural gratuito con una gran colección de libros y arte de todo el mundo; para nosotros es un imprescindible que hacer en Irlanda si estás en Dublín.

Por supuesto, debes visitar las dos catedrales de Dublín: la dedicada a la Santísima Trinidad, y fundada por los vikingos en el siglo XI, y la de San Patricio, la mayor de las iglesias de Irlanda, y en la que descansan los restos de Jonathan Swift, escritor de ‘Los viajes de Gulliver’.

A estas alturas ya sabrás que en Irlanda se bebe muchísima cerveza, y que la Guinness es la bebida por excelencia en el país. En Dublín puedes visitar la fábrica de esta cerveza y mirar la ciudad desde las alturas, además de degustarla (si no la has probado, tiene un sabor particular).

Los platos más típicos de Irlanda son el chowder seafood (una especie de sopa de marisco, muy sabrosa), el Irish stew (estofado de carne cocinado con Guinness, sí), o el tradicional desayuno irlandés, similar al británico, y del que no somos muy fan a esa hora del día.

Los acantilados de Moher son, sin duda, el principal atractivo de Irlanda y uno de los imprescindibles si visitas el país durante una semana. De hecho, ya compensa viajar al país solo por verlos.

Nosotros hicimos una excursión guiada de un día con Civitatis que merece mucho la pena, pues te llevan desde Dublín (el viaje es de unas tres horas por trayecto) y hace una parada en el pueblo de Galway. Una opción recomendable si no dispones de coche de alquiler.

Admira las impresionantes vistas de los acantilados de Moher y observa las aves marinas que anidan en la zona. La vista del Atlántico desde lo alto de los acantilados es simplemente impresionante y te dejará sin aliento. Se trata de uno de los lugares que ver en Irlanda en una semana imprescindibles.

Eso sí, el tiempo puede enturbiar tu visita: A nosotros nos hizo viento y lluvia; aún así, disfrutarás muchísimo viendo este asombroso espectáculo inerte de la naturaleza, unos cortes gigantescos que terminan en el océano.

Por cierto, visita también el centro de visitantes para conocer más sobre cómo se formaron los acantilados, y camina por alguno de los senderos que recorren la zona para continuar observando las impresionantes vistas.

Como toda Irlanda, Galway, cerca de los acantilados, es una ciudad famosa por la música: Te encontrarás músicos callejeros por sus vías adoquinadas.

También puedes acercarte al mercado de Galway, en el que probar la comida local y comprar algún artículo de artesanía local.

Igualmente, el barrio latino de la pintoresca Galway está salpicado con coloridas casas y pubs. La ciudad también tiene unos bonitos canales.

Durante nuestra estancia de una semana en Irlanda, nos alojamos las seis noches en el Maldron Hotel Smithfield de Dublín, un alojamiento con todas las comodidades, además de cuidadas instalaciones y una muy buena situación, cerca del río Liffey.

Además, te indicamos dónde puedes dormir en el resto de los pueblos y ciudades por si decides alojarte en otro lugar:

• Dónde dormir en Dublín
• Dónde dormir en Galway
• Dónde dormir en Kilkenny
• Dónde dormir en Cork
• Dónde dormir en Limerick
• Dónde dormir en Killarney

Irlanda es hermosa durante todo el año, pero la temporada de verano, de junio a agosto, suele ser la más popular debido al clima más cálido y a los días más largos. Sin embargo, la primavera y el otoño también son momentos encantadores para visitar, con menos multitude

No es estrictamente necesario, pero tener un coche puede hacer que explorar el país sea más conveniente, especialmente si planeas visitar áreas rurales y lugares alejados.

El sistema de transporte público es bueno, pero un coche te dará más flexibilidad para explorar a tu propio ritmo. Eso sí, conducen por la izquierda.

El clima irlandés es variable, por lo que es recomendable llevar ropa adecuada para la lluvia y capas de ropa para adaptarse a cambios en la temperatura.

No olvides un paraguas resistente y calzado impermeable para estar preparado para la lluvia ocasional. Te lo decimos por experiencia.

La moneda utilizada en Irlanda es el euro (EUR).

Irlanda es generalmente un destino seguro para los viajeros. Las tasas de criminalidad son bajas, y la población local es amigable y acogedora.

Como en cualquier lugar, es importante tomar precauciones normales de seguridad, como cuidar tus pertenencias y estar atento a tu entorno.

Siempre puedes contratar un seguro de viajes si quieres estar más cubierto, por ejemplo si haces actividades de deporte y aventura. Nosotros solemos usar el seguro de viajes de IATI, del cual si contratas a través del blog tendrás un 5% de descuento, y ayudarás a mantener Los viajes de Gulliver sin ningún coste adicional para ti.